Dreaming in Diagonal (35)

Dreaming in Diagonal 35

Joder!

A veces es increíble la velocidad a la que pasa el tiempo. Un dia te paras, miras atrás y dices –Ya ha pasado todo este tiempo desde aquello?
Eso es lo que me ha pasado a mi cuando he visto la ultima vez que publiqué algo por estos lares. Era consciente de que había pasado bastante tiempo pero…tanto?

He mi defensa solo puedo decir que ha sido una temporada muy intensa. Cambios en el trabajo y en varios aspectos de mi vida personal. Nuevas responsabilidades, nuevos retos…no me he aburrido, la verdad.

Pero no he dejado de tener mis pequeños momentos “en Diagonal”. La verdad es que no sería lo mismo sin ellos. Incluso he tenido la suerte, recientemente, de darme una escapada al lugar donde todo esto nació, hace ya tanto tiempo…

Y después de tanto tiempo, que voy a compartir con vosotros?

Bueno, me gustaría empezar por una “noticia” tecnológica bastante reciente.

Como ya la gran mayoría debe saber, la ultima actualización de la aplicación móvil Whatsapp trajo consigo una nueva configuración de privacidad. Esta consiste en que ahora, puedes definir quien puede ver “tu ultima conexión”, “tu foto de perfil” y “tu estado”, dándote a elegir entre “todo el mundo”, “mis contactos” y “nadie”.

Viéndolo desde el lado de la privacidad de cada uno, me parece una gran mejora, sin lugar a dudas.

Pero viéndolo desde otro punto de vista, me parece…triste. Por que? Porque pienso que con el Whatsapp hemos tenido resultados similares al que se tienen con muchas cosas en esta vida. Nos ha proporcionado mejoras en nuestra vida diaria, pero también ha empeorado cosas. Centrándonos en el tema de la privacidad, cosas como “el doble check” y el poder ver as ultimas horas de conexión de nuestros contactos han contribuido a peleas y malos rollos entre compañeros de trabajo, amigos, parejas, familiares…

Antiguamente, llamabas a una persona a casa y si no respondía nadie, lo primero (y mas bien único) que pensabas era que esa persona no estaba en casa…y ya está, no pasaba nada mas, lo llamabas mas tarde y listo.
Ahora, en cambio, no responder a un whatsapp nada mas verlo puede dar lugar a que la persona que te lo ha mandado elucubre las mas horribles y desquiciadas teorías sobre por qué estas cometiendo el imperdonable acto de no responderle a ese whatsapp! Si estuviéramos en otra época, mas de uno acabaría ante el tribunal de la Inquisición por semejante barbarie. Y ya como te toque esa persona que no para de escribirte (para que tu móvil suene una y otra vez) hasta que le respondes, ya es cuando estas perdido del todo…

Ya nadie llama por teléfono? Nadie envía postales? Nadie queda para tomar un café?
Ya nadie quiere hablar las cosas de modo que se eviten los malentendidos propios de algo tan frío e impersonal como un whatsapp?

Siguiendo con el hilo de los métodos de comunicación 2.0, me gustaría hacer una pregunta al viento…Hay alguien que se piense 2 veces las cosas, antes de publicar algo en Facebook?

Y no me refiero solo el hecho de publicar algo, si no también a comentar una publicación…También influye el hecho de que en mi trabajo manejo varias redes sociales, pero he de decir que cada dia me asombro con las cosas que la gente escribe en Facebook.

Uno no deja de sorprenderse, la verdad. Creo de corazón que, si todo el mundo se parara un segundo y leyera lo que ha escrito antes de darle al botón de publicar, muchas historias serían muy diferente de cómo son.

Y, por favor, al igual que lo he dicho antes hablando de Whatsapp, lo digo de Facebook…dejaos de tanto postear y tanto mandar mensajes, y si tenéis que decirle algo a alguien, decídselo a la cara. La sensación es….ufff...….indescriptible! Tenéis que vivirla!

Y siguiendo con el hilo de facebook (ya que esta plataforma es muy usada para llevar a cabo el tema del que hablaré ahora) voy a decir un par de cosas sobre las lecciones de moralidad de la gente.

Es simple. Estoy hasta los mismísimos COJ*NES de todos aquellos que cada vez que abren la boca, tratan de darte una lección de moralidad, diciéndote lo que es correcto y lo que no. Por supuesto, sus puntos de vista no son puntos de vista, ni opiniones ni nada por el estilo. Son verdades como puños, escritas con letras de fuego sobre piedra sagrada y traídas hasta nosotros por algún descendiente de Moisés, y ellos son los nuevos apóstoles, encargados de transmitirnos esas lecciones de moralidad.

Pero vamos a ver, como una persona que está todo el dia dándole lecciones de moralidad a todo el mundo, puedo esperar tener credibilidad alguna, si, a todo aquel que no está de acuerdo con lo que el dice, lo tilda de gilipollas en adelante?

Da igual que se esté hablando de política, de sociedad, de la familia, de la amistad, relaciones de pareja…estas personas lo tienen muy claro, o estas con ellos o estas contra ellos. Ellos tienen la única y verdadera verdad sobre las cosas y el no estar en su onda no te traerá mas que desgracias…

De verdad, estoy muy muy cansado de estas personas. Cada vez que hablo de algún tema con alguien, procuro dejar claro que aquello que yo expreso es mi opinión, tan valida como otra cualquiera, y lo reitero una y otra vez, por la simple razón de que eso es así. No es tan difícil, verdad? Bueno, pues parece que si lo es para algunas personas.

¿Qué se puede hacer con ellas? Que? Porque yo no lo se (aparte de enviarlas bien lejos…)

La gente cambia. Si si, la gente cambia. Obviamente hay muchos “grados de cambio”, pero en mayor o menor medida, la gente cambia. Aunque creo que lo importante en este tema es lo que cambia. Pueden ser cosas superficiales, pueden ser cosas mas profundas e incluso en algunos casos poco frecuentes, puede ser la misma esencia de una persona.

Los cambios pueden ser para bien, para peor o pasar inadvertidos. Todo depende del punto de vista con quiera verlos cada uno.

El otro dia estaba viendo un capitulo de una serie, y de vez en cuando una voz en off hacia algunos comentarios, reflexiones, etc y hubo algo que dijo, que llamó mucho mi atención, y era lo siguiente:

- Sabes quien eres? Sabes que te ha pasado? Quieres vivir así?

Sin duda, para mi son 3 preguntas que todos debemos hacernos cada cierto tiempo.

Está claro que todo el mundo cambia, de ello se encarga el paso del tiempo y las experiencias que vivimos por el camino. Y la forma en que estas nos cambian depende de lo que aprendamos de ellas, del nivel al que nos afecten esas experiencias.
En mi caso, me gusta creer que, a pesar de que las experiencias vividas hasta hoy me han cambiando tanto superficialmente como en profundidad, sigo siendo (en esencia) tal y como siempre he sido. Y la verdad es que es una esencia que me gusta. Y el primer paso para gustarle a los demás, es gustarte a ti mismo.
Y a lo largo de estos años, he conocido personas que han cambiado. Algunas han cambiado para bien, otras para mal (siempre hablando desde mi punto de vista).

En algunas ocasiones achaco esos cambios a experiencias vividas, pero en otra los achaco a que esas personas, en esencia, siempre fueron así, solo que ese verdadero ser estaba oculto bajo capas de…no se como explicarlo. Simplemente diré bajo otras capas. Y el paso del tiempo y las experiencias vividas han ido eliminando esas capas para acabar mostrando a la verdadera persona que cada uno lleva dentro, tal y como es.

Y eso es así amigos, aunque a veces no queramos creerlo, aunque a veces duela.

Me apetece seguir escribiendo, pero tengo otras cosas que reclaman mi atención, así que lo dejaremos aquí por ahora.

Como siempre, estoy abierto a vuestros comentarios y criticas (siempre constructivas) y, siempre que os apetezca, podemos charlar junto a una taza de café.

Disfrutad de la primavera, que dicen que la sangre altera, y no olvidéis encontrar tiempo para dejar que vuestro cerebro reflexione.

Me despido de vosotros con la canción que está sonando mientras escribo estas ultimas palabras…

Ciao!