Que es la vida, si no una sucesión
de momentos, de decisiones, de experiencias...? Cada una de estas cosas
podríamos representarlas, por ejemplo, con retales. Retales que cosemos ( o no
) a la manta que forma nuestra vida, esa manta que todos en alguna que otra
ocasión decidimos liarnos en la cabeza. Retales que decidimos coser mejor o
peor, porque un pespunte de más o de menos puede marcar una gran diferencia. Todo depende de lo fuerte que queramos agarrar ese
retal a nuestra vida.
Todos los días tomamos decisiones sin estar seguros
de cómo acabaran, si son las correctas o no, si son la mejor decisión o podría
haber otra mejor. Es lo que tiene ser humanos, que por mucho que queramos, no
podemos estar seguros de cómo acabará todo. El problema es que, una vez cosido
un retal, es complicado descoserlo, no es imposible, pero si complicado, y mas
cuando está unido a otros. No debemos estar constantemente mirando los retales
que en su día cosimos, y darle vueltas a si hicimos bien al coserlo. Todos,
para lo bueno y para lo malo, forman parte de tu vida.
Cada retal es algo tuyo, nada ni nadie debe influir
en ellos, solo tu manejas la aguja y el hilo de tu vida. No permitas que esto
cambie jamás, porque si pierdes el control, te será muy difícil
recuperarlo...incluso puede darse el caso de que no quieras hacerlo, dejando tu
vida en manos de otra persona.
Y siguiendo con el hilo del anterior
párrafo, podríamos hablar de "La personalidad"
Una deficinicion sencilla de este concepto sería decir
que es el conjunto de los pensamientos, sentimientos, actitudes, hábitos y la
conducta de cada individuo, que persiste a lo largo del tiempo frente a
distintas situaciones distinguiendo a un individuo de cualquier otro haciéndolo
diferente a los demás.
Es la teoría, pero la realidad puede ser bien distinta,
sobre todo si vemos los cada vez mas
frecuentes casos las "personas sin personalidad propia". Aquellas que
adaptan su forma de ser a determinadas circunstancias temporales (familia,
amistades, pareja, trabajo...) Creo que es triste, muy triste, tener una
personalidad u otra según vivas algunas de estas circunstancias, porque si hay
algo que nos hace únicos y especiales, es precisamente nuestra personalidad. Y
creo que no tener una propia, única, es algo muy triste.
Un claro ejemplo que nunca pasa
de moda es la de aquellas personas que, en su afán por tener “amigos”, adaptan
sus hábitos y su forma de ser al grupo de personas en cuestión,
independientemente de que compartan o no esos gustos.
Pero claro, tampoco seamos
hipócritas ni tampoco nos confundamos. Todos, en alguna ocasión y ocasiones,
hemos hecho o dejado de hacer algo por causas similares a las que antes he
comentado. Es normal, que uno ceda de vez en cuando, dadas las circunstancias.
De lo que aquí hablo, es de mantener firme tus convicciones, tus valores, tu
forma de ser...tu personalidad! Aunque claro, para esto primero hay que
tenerla.
Se dice que las personas somos
seres únicos en el mundo, que no hay 2 iguales...es una pena renunciar a este
privilegio por “nada”, y digo nada, porque cualquier cosa que te haga (o por la
que decidas) no tener personalidad propia, no merece ser reconocida como algo.
Educación. Que palabra tan
bonita y que poco la valoramos hoy día. Y la verdad es que, por muchas vueltas
que le doy, no consigo encontrar ninguna razón lógica para que la gente no sea
educada. Por que, entonces? Es por que sus padres no se le inculcaron? Por que
no fue al colegio? Por que es su forma de revelarse contra la sociedad? Por que
se sienten unos incomprendidos?
Siguiendo la línea de aquellos
que no sois educados, os diré que los motivos por los que no tenéis “educación
básica” me importan 3 cojon*s. La educación es algo tan básico que, si perdemos
eso, prácticamente no tenemos nada. No
estoy hablando de educación a nivel estudios, hablo de educación al nivel más
básico de la expresión. Hablo de hablar y tratar con respeto a las personas,
recordando que somos eso mismo, personas. Me refiero a algo tan sencillo como
pedir las cosas “por favor” y decir “gracias” cuando corresponde. Ya ni
siquiera voy a entrar en que el por favor o el gracias sean “de verdad”,
simplemente se trata de educación básica.
Más nos vale no perder eso y
preocuparnos de inculcárselo a todos aquellos que no lo practican, porque las
consecuencias podrían ser peor de lo que nos creemos.
A veces pienso en esas palabras que dicen que somos los
únicos “animales racionales” que habitan la tierra, y la verdad es que me
resulta gracioso. Y es debido a que me parece irónico que nos adjudiquemos ese
titulo, cuando pienso que somos los seres más irracionalmente racionales que
existen.
Y si no, ¿que ser racional podría pedirle a alguien que sea
la mitad de nada, para luego pedirle el doble de todo?
Admito que una parte es culpa mía. A
lo largo de mis años, he malacostumbrado a muchas personas que forman parte de
mi vida a tener unos privilegios que no se han ganado, y por lo tanto, muchos
no han sabido valorar ni actuar en consecuencia. Pero lo peor es que, cuando
les retiras esos privilegios, tienen el morro de quejarse. ¿Alguien me explica
que hay de racional en esto? Vale, seguro que alguien dirá que en parte es
lógico, y en parte podría estar de acuerdo, pero realmente no lo estoy, y por
ello después pasan las cosas que pasan. Muchas personas creen conocerme mejor
de lo que realmente me conocen, creen saber lo que estoy pensando en
determinados momentos, lo que voy a decir, lo que voy a hacer, lo que voy a
pedir...y el creer esto les lleva a equivocarse en muchas ocasiones. Con lo
fácil que es preguntar y lo que le cuesta a mucha gente hacerlo.
Hay una cosa que debemos tener todos
muy clara. Cada uno es libre de dar lo que quiera, cuando quiera y como quiera.
Por lo tanto, respetemos lo que cada persona nos da, y no nos creamos con
derecho a exigir nada a nadie, ni nos invitemos privilegios que no nos han
concedido.
Hay un proverbio, creo que Árabe,
que dice que “Si Dios nos creó con dos orejas, dos ojos y una sola boca,
es porque tenemos que escuchar y ver dos veces antes que hablar”. Todos
necesitamos a alguien con quien poder hablar abiertamente, contarle cosas,
desahogarte, soltar ese peso que se te crea dentro. A todos nos gusta tener a
alguien así, pero para ello también nosotros tenemos que estar dispuestos a ser
esa persona para alguien. Es muy fácil criticar a alguien porque, según otra
persona, está todo el día “quejándose” por todo, o el que dice que “fulanito
solo me llama para quejarse por algo”. En estos casos, tiendo a recordar un
dicho que dice que “Cuando alguien te habla de
sus problemas no significa que se queje, significa que confía en ti”
Ser amigo de alguien es aceptar un titulo que a muchos les
queda grande, de ti depende demostrar si estas a la altura de las
circunstancias.
Dicen que nada es para siempre.
Que todo tiene un principio y un final. Puede ser antes, después, pronto,
dentro de mucho...pero que todo, tarde o temprano, se acaba.
Pues a día de hoy, sigo pensando
que no. Que en este mundo aun quedan cosas que pueden ser eternas, cosas tan
increíblemente únicas que nunca acaban, que perduran a pesar del paso del
tiempo. Si, cuesta creerlo, y más cuando todos los días vemos cosas terminar
cuando creíamos que durarían para siempre, o al menos más tiempo del que
duraron. No hablo de nada en concreto, me refiero a todo, a todas las cosas que
no queremos que acaben nunca...
La eternidad no es algo
inalcanzable, solo necesitas comprenderla, aprender a verla, a vivirla. El
“para siempre” es algo real, no son solo palabras con las que terminar una
película de Disney, pero hay que saber lo que significa, según a que cosa se lo
queramos aplicar. Porque no hay 2 “para siempre” iguales, de ti depende como
sea el tuyo...
Una vez Alicia le preguntó al conejo blanco
que cuanto tiempo era para siempre...y el le respondió que, a veces, tan solo es
un segundo...Bueno, creo que ya esta bien por hoy. Podria hablar de muchas mas cosas, pero tampoco es cuestion de enrollarse y enrollarse. Ya habrá tiempo para mas.
Disfrutad del verano!
Chau